Según el reconocido analista Ming-Chi Kuo, Apple planea incorporar metal líquido en las bisagras de su próximo iPhone plegable, una innovación que promete mejorar significativamente la durabilidad del dispositivo y reducir las marcas de pliegue en la pantalla.
Esta será la primera vez que Apple utilice el metal líquido, fabricado mediante fundición a presión, en un componente mecánico crítico. Anteriormente, la empresa solo había empleado este material en piezas más pequeñas como los pines expulsores de la bandeja SIM.
El nuevo iPhone plegable contará con una pantalla principal de 7.8 pulgadas cuando esté desplegado y una pantalla externa de 5.5 pulgadas. El diseño seguirá un estilo de libro similar al Samsung Galaxy Z Fold, en lugar de un formato tipo concha.
Las especificaciones preliminares sugieren que el dispositivo incluirá dos cámaras traseras, una cámara frontal y Touch ID integrado en el botón de encendido. En cuanto a sus dimensiones, podría alcanzar un grosor de apenas 4.5mm desplegado y entre 9mm y 9.5mm cuando esté cerrado.
La empresa Dongguan EonTec será la proveedora exclusiva del metal líquido para este componente. Según los informes, la producción en masa comenzaría en el último trimestre de 2026, lo que apunta a un posible lanzamiento entre finales de 2026 y principios de 2027.
Esta innovación tecnológica representa un paso importante para Apple en el mercado de los dispositivos plegables, donde la durabilidad y la minimización de las marcas de pliegue han sido desafíos constantes para los fabricantes.