La junta directiva de Intel anunció la salida repentina de Pat Gelsinger como Director Ejecutivo después de menos de cuatro años en el cargo, en medio de preocupaciones sobre el lento progreso de la compañía en áreas clave.
La salida de Gelsinger, que se hizo efectiva el 1 de diciembre de 2024, fue anunciada de manera abrupta y sin una transición planificada, lo que sugiere tensiones entre el ejecutivo y la junta directiva.
Durante su gestión, Gelsinger enfrentó diversos desafíos, incluyendo retrasos en plataformas de servidores de próxima generación, dificultades en el desarrollo de chips para inteligencia artificial y una lenta evolución en la división de fundición de semiconductores.
La junta nombró a dos directores interinos: David Zinsner, actual Director Financiero, y Michelle Johnston Holthaus, quien liderará la división Intel Products. Esta estructura provisional genera especulaciones sobre una posible división de la empresa en unidades independientes.
La búsqueda de un nuevo líder permanente representa un reto importante para Intel. El sucesor deberá tener experiencia tanto en desarrollo de productos como en manufactura de semiconductores, una combinación poco común en la industria.
La forma repentina de la salida, sin acuerdo de transición y con la renuncia inmediata al directorio, indica que no fue una separación amistosa. Analistas sugieren que inversores activistas pudieron haber influido en la decisión de la junta.
El cambio de liderazgo ocurre en un momento crítico para Intel, que busca recuperar su posición competitiva en el mercado global de semiconductores mientras enfrenta una intensa competencia de rivales como AMD y NVIDIA.